Testimonio: Isabel y Diego. Nacimiento en junio de 2018
Después de 2 años de matrimonio el ginecólogo nos dijo que era muy difícil que tuviéramos hijos sin ayuda de una técnica de reproducción asistida. En ningún momento nos explicó cual era el motivo, aunque la edad, 40 años, lo hacía más difícil. Veíamos como única solución la inseminación homóloga y por eso realizamos ciclos que resultaron fallidos, nos llegamos a informar sobre INVO, aunque no lo vimos claro.
Como católicos, era muy importante encontrar un camino que no dañara nuestra relación y respetase la relación conyugal.
En una charla sobre la Humanae Vitae nos hablaron sobre la Naprotecnología, no era la primera vez que habíamos oído hablar sobre la Napro, pero en esta ocasión lo novedoso es que una Doctora practicaba la especialidad en el COF de Getafe.
Contactamos con la Asociación Española de Naprotecnología, www.naprotec.es y nos confirmaron la información escuchada en la charla. La Dra. Marcos pasaba consulta en el COF de Getafe, pero antes de la primera visita debía realizar un reconocimiento de mi ciclo y por eso me derivaron a la monitora que atiende desde Madrid, María Fernández.
Después de dos meses de iniciar el modelo Creighton, nos visitamos con la Dra. Marcos, nos pidió pruebas y en poco tiempo me diagnosticó niveles hormonales insuficientes, a los tres meses de tratamiento, con suplementos de estrógenos y progesterona, llegó el milagro.
Desde el primer día nos hemos sentimos apoyados y comprendidos, nos dieron una explicación sobre cuál era el problema y el tratamiento para solucionarlo. Además, el método es muy respetuoso con la relación íntima entre los esposos por lo que no provoca ningún tipo de estrés.
El seguimiento realizado por la Doctora Helena Marcos del embarazo lo ha llevado a feliz término y en junio de 2018 ha nacido María, un regalito del cielo.
Queremos agradecer a todo el equipo de Naprotec y, en especial, a María Fernández y a la Doctora Helena Marcos su dedicación, amabilidad, profesionalidad y saber hacer.
Isabel y Diego.